jueves, 13 de marzo de 2008

Microempresarios V/S Microtraficantes

Resulta que como están las cosas lo único que me va faltando es un novio decente. Ya soy toda una trabajadora con horarios y mieldas, vivo en un recinto del todo respetable a pasos de una estación de metro, prontamente espero la tiví y el dividí, es decir, me convierto a pasos agigantados en una huevona de mierda. Al parecer hasta mis gustos se están adecuando a mi nueva situación y ya no me fijo en don nadiens sino en empresarios de rubros que no pretendo especificar (y alguno que otro taxista pirata por ahí, si todo no podía ser tan color de rosa). Declaro que me harté de perdedores, de clochards, de vagabundos de todas las especies hasta nuevo aviso. En realidad debería heberme hartado de los hombres en general, de los para follar, de los para sufrir, de los para carretear porque cada día me convenso más de que son unos pelotudos que si no tuvieran penes no tendrían ni el más mínimo atractivo. Está mejor la vida así...

No hay comentarios: